La competencia por la atención del cliente es feroz.
Las bandejas de entrada están inundadas de correos electrónicos que compiten por un clic y es aquí donde el concepto de «nudging» o «empujones sutiles» entra en juego, proporcionando una estrategia efectiva para influir en el comportamiento del cliente.
Para que entiendas un poco más de este concepto, el nudging es una práctica que busca influir en las decisiones de las personas sin restringir sus opciones. Este término popularizado por los economistas Richard Thaler y Cass Sunstein, se basa en la psicología conductual y sugiere que:
“Los pequeños cambios en el entorno pueden guiar a las personas hacia decisiones más favorables sin que se sientan obligadas a hacerlo”.
¿Cómo aplicar el nudging a tus campañas de email marketing?
- Con un asunto personalizado que incluya el nombre del destinatario y un sentido de urgencia para captar la atención además de un diseño de botones atractivos.
- Incluir testimonios de otros clientes satisfechos o mostrar cuántas personas ya han aprovechado una oferta puede crear un efecto de «prueba social», lo que aumenta la credibilidad y confianza en tu producto o servicio.
- Ofrecer recompensas por acciones específicas como suscribirse a una lista de correo o realizar una compra puede incentivar a conseguir los comportamientos deseados. Un programa de fidelización bien diseñado mantiene a los clientes comprometidos y leales.
- Los botones de (CTA) deben ser visualmente atractivos y fáciles de encontrar. Colores llamativos, textos claros y una ubicación estratégica pueden hacer la diferencia.
- Los correos electrónicos de seguimiento que recuerdan a los clientes sobre carritos abandonados, ofertas próximas a expirar o productos recomendados basados en compras anteriores.
- Facilitar el proceso de compra o suscripción puede reducir la fricción y aumentar la conversión. Un diseño limpio, un proceso de pago sencillo y la opción de guardar la información de pago pueden hacer que el cliente complete la acción deseada más fácilmente.
Al implementar técnicas de nudging, las empresas pueden mejorar sus tasas de apertura, conversión y fidelización, creando una experiencia más personalizada para sus clientes. Estos «empujones» sutiles no solo ayudan a guiar a los clientes hacia decisiones más favorables para ellos y para el negocio, sino que también construyen una relación más fuerte y duradera basada en la confianza y el compromiso mutuo.
La clave está en encontrar el equilibrio adecuado entre ser persuasivo y no resultar invasivo, ofreciendo siempre un valor añadido y respetando la autonomía del cliente.